Es cierto, no me gusta coser, pero si hay que hacerlo…, lo hago. Si alguna mente psicoanalítica calenturienta esta pensando en que eso se debe «a mi rechazo a la condición femenina o a la frustración del pene»…, ¡¡¡ POR FAVOR !!!.., tampoco me gusta cambiar la rueda del auto, desmontar un desagüe o tapar… Sigue leyendo ¡No me gusta coser!