Ayer contaba que he empezado un curso de caligrafia y que alguien me dijo que estaba como una cabra, y como siempre, nuestra amiga Julie (eltiempohabitado.wordpress.com) me decía que mejor ser cabra que chota (esta todavía es mas insegura y loca) y me recordaba que había empezado el año de la cabra en el horóscopo chino, ya sabéis, creativos, ingeniosos, altruistas…, así que casi era un piropo que me hubieran dicho eso…
Lo cierto es que yo sigo con mi caligrafia, ya salí de «los palotes» y aunque no la domino todavía bien, esto es parte de una copia del Documento de donación que Ramiro I, rey de Aragón, hizo de trece iglesias y sus poblaciones al Papa pidiendo su protección para el reino. Parece ser que es la única vez en la historia que un rey hace donación al Papa de territorios de su propiedad. Esto solo es la copia del texto, el original tiene unas ilustraciones muy bonitas y esta en el Archivo de la Catedral de Jaca.
Por otro lado, J. Ignacio (plumayluz.wordpress.com) nos regalaba esta fotografía en la que los lomos de los libros tienen la letra visigótica. (Sancho III, rey de Navarra dividió su reino entre sus cuatro hijos y fue el padre de Ramiro I, primer rey de Aragón). Los reyes cristianos de aquella época eran descendientes de los visigodos luego es lógico que fuera letra visigotica. Ya veo que no soy la única a la que le llama la atencion la caligrafia y lo antiguo…
Quiero aclarar que al decir que la letra visigótica era propia del Rieno de Aragón es porque se mantuvo y desarrollo en el Reino y Corona de Aragon hasta el s. XIII, mientras que en otras zonas se había adoptado la moda de la letra carolingia.
¡Qué envidia! 🙂 ¡Me encantaría hacer un curso! El problema es el de siempre: ¡la falta de tiempo! 😦
Anímate, no sabes como relaja…, te hace saborear las cosas. Un abrazo.
🙂 si me animo, ya te contaré.
Me hiciste reír, pero nuestros modismos son tan ricos que merece la pena detenerse en ellos un poco, aunque sea a la ligera… Porque estar como… da para mucho:
Imagínate si en vez de decirte «estás como una cabra» -que es lo mejor que te pueden decir-
te dicen, «estás como sardina en escabeche» o «estás siempre pío pío como los pollitos» o «estás de atar» o «estás papando moscas»… y hasta te pueden llamar «fideo» «lechón» «leño» «marrana» «ovillo» «cascajo» y no sé cuántas cosas más… no sigo, porque hasta te pueden decir, «estás hecha una puerca» jajajaja. Si, lo de cabra, es lo mejor que te pueden decir, amiga. Y por cierto, lo de la caligrafía es un lujo. No dudo que lo vas a disfrutar. Un besote.
Confío en ello, lo cierto es que el profesor es un encanto y sabe transmitir no solo su habilidad con los trazos sino también su amor a las letras. Un abrazo.
Muy interesante entrada, María. Precisamente esta mañana escuché en Radio 1 de RNE que el tema propuesto para debatir versaba sobre la necesidad o no de una buena caligrafía, dado el uso generalizado de las nuevas tecnologías. No pude escuchar el debate, pero yo creo que no hay nada que cuestionar sobre una caligrafía que se entienda, aunque sea la lista de la compra. Me parece hermoso que te hayas apuntado a ese curso de caligrafía porque, según nos reflejas muy bien, va su finalidad va mucho más allá que el conseguir una letra bonita y legible.
Tiene mucha razón Julie.
Que pases un estupendo día. Un abrazo.
Gracias Isabel, lo cierto es que siempre tuve curiosidad y ya sabes que cuando se tomaban apuntes en la universidad, a la carrera, la letra se deformaba mucho…, ahora puedo disfrutar de escribir cada letra con calma y eso, es un lujo. Saludos.
¡Te felicito, guapa! Te diré que amo la caligrafía… era muy buena en ella, hace algunos años, y es un buen hábito que he perdido, lamentablemente. Realmente me alegro por ti. Besitos.
Gracias niña, yo aquí, de aprendiza y muy feliz…, yo no hice caligrafia con plumilla sino unos cuadernos que llenábamos a lapiz con mucho tedio y sin entender para que…, luego, los estudios, los apuntes, las prisas…esas cosas…, al final, una letra horrorosa…, así que ahora paciencia y buen hacer…, besitos.
En poco tiempo verás los avances 🙂 ¡Abrazo grande!
Eso espero…, jajaja.
¡Te pongo la firma!
Qué bueno!! de jovencita hice dos cursos de caligrafía…me encantaba!! La verdad es que se me daba bastante bien y me sirvió mucho para tener una bonita letra. Al principio era un poco rollo, pero a medida que ibas avanzando te iba enganchando más. Así que nada, a disfrutar del curso y…gracias por los datos históricos que apuntas que siempre resultan de interés 😉 Saludos 🙂
Gracias a ti por comentar. Un abrazo.
Un mundo nuevo para explorar, las dos, tintero y pincel. Que lo pases bien y nos vas dándo impresiones y datos como los de esta entrada, desconocidos para la mayoría. Besos.
Jajaja, eso y que los licenciados en Historia me acusen de intrusismo…, jajaja.
Pues a mí me gusta mucho… Bueno, ya lo has visto. Lo que pasa es que soy pésimo escribiendo, así que he pensado que cuando la domines del todo, que según vas con ello, creo que será dentro de poco, te contrataré para que escribas en ese tipo de letra mis poemas, para guardarlos en un manuscrito, que seguro que luego, al pasar del tiempo, dará mucho más gusto leerlos…
Ya hablaremos…
Un abrazo, con tinta y letra de versos.
Jajaja, me has hecho reír, pero si te hace ilusión , todo es cuestión de proponérselo…, un abrazo.