Dejar sitio

Muchas veces nos comportamos como si fuéramos «don Imprescindible», lo hacemos sin darnos cuenta…,  por ayudar…,  para que la otra persona no tenga que…

imageEso, que puede ser bueno puede resultar también muy malo. Con los niños lo entendemos todos pero con los adultos… Si esa persona no hace, no se equivoca, no lo intenta, será siempre una persona dependiente de…, ¿eso es lo que queremos?

Lo cierto es que es muy difícil «dejar sitio» a los demás para que se equivoquen, cuando vemos lo fácil que es hacer algo y lo rápido que lo haríamos nosotros… ¡Cuantas veces estamos tentados de decir: » quita que lo hago yo»!

Mal sistema para ellos y para nosotros porque ellos siempre serán «torpes…, poco hábiles…, indecisos…, ante un problema o actividad nuevo» y nosotros llegaremos a estar saturados de tareas que debimos aprender a entrenar en otros y/o a delegar hace mucho tiempo.

Por tinteroypincel

Me gusta la Naturaleza, la literatura, el dibujo, la pintura y los niños. Estar con mis amigos y contar historias, reír y hacer un pocos más fácil la vida a los demás.

14 comentarios

      1. El otro día me dijo » yo hago mejor las estrellas del portal, las tuyas son muy delgadas», e hizo una cometa con una cola tan gorda que no sé cómo podía volar, Jajajaja.

  1. ¡Cuánta verdad! Cero que dejar lugar al otro es una forma de reconocerlo, de permitirle ser aún a pesar nuestro. Un gran abrazo para el tintero y un beso para el pincel.

  2. Preciosa foto! Así es amiga, y todos nos equivocamos, siempre hay que «dejar sitio» al otro y admirar lo que hace, porque lo que hace, haga lo que haga, es importante. Hermosa entrada.

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