Una conocida, licenciada en Literatura y que esta jubilada, acude a un Centro Social que imparte clases sobre diferentes materias. Esta claro que es de las personas con «vida intelectual».
Entre ellas, Historia: «Lo bueno de estas clases es que no se limitan a batallas, fechas y cosas similares con las que nos agobiaron en nuestra edad escolar, sino que es una visión más amplia de hechos sociológicos, económicos, demográficos y/o sucesos históricos que fueron marcando toda la evolución/involución de la sociedad y en la que la participación profesor-alumnos es bidireccional».
Es muy necesario ampliar siempre nuestros mapas cognitivos, crear nuevos intereses y rutas neuronales para evitar las respuestas estereotipadas y rigidas. Aun más a partir de una cierta edad, para evitar el anquilosamiento y las alteraciones o enfermedades mentales degenerativas.
Pero las personas mayores tambien pueden dedicarse a cuidar plantas, huertos, hacer postres, mantener recetas antiguas u otras actividades que les llenen de satisfacción y que a todos nos hacen la vida mas agradable, todas esas tareas que, a veces, por comodidad o prisa, no hacemos los más jóvenes.
Cuando llevo a mis hijos a ver a mis suegros a la parcela, son los más felices del mundo dando de comer a las gallinas y recogiendo los tomates. Y me dicen que ellos quieren vivir en una casita así… ¡¡Y yo también cuando me jubile!!
Es una gran oportunidad tener a los abuelos cerca. Felicidades.