Siempre se dijo: «Cuida los pequeños detalles, que los grandes se cuidan solos». Saludar a las personas de un grupo y dejar a alguna sin hacerlo, puede ser un despiste…, pero si no lo es, resulta de mal gusto, o de mala educación salvo que esa o esas personas, nos hayan ofendido de un modo u otro.
Estoy en algunos grupos, como muchas otras personas, donde las relaciones son fluidas pero no dejo de sorprenderme que algunas personas, cuando abandonaban el grupo porque pasaban a otro más «avanzado», pasan de todos nosotros como si fuéramos «apestados». No es una obligación, pero resultaría un bonito detalle, un comportamiento educado. Uno sí que vino a decirnos adiós. Al darle las gracias por ese detalle comentó. «Es que hemos estado juntos más de dos meses, y ¡qué menos!, hemos compartido dudas y proyectos». Está claro que esa persona sabe gestionar su tiempo y mostrar empatía.
Hoy mi amiga y yo estábamos sentadas tomando café en una terraza y una tercera persona se ha dirigido a ella a escasos pasos de distancia (ni saludó con un «buenos días», un gesto, o «un perdón por la interrupción»). Se puso a hablar con ella directamente como si yo no estuviera. Cuando se ha ido he comentado que me había sentido «transparente».
Mi amiga justificó: «Es que la gente joven es así». No, repliqué yo: «la gente mal educada es así».
Esos detalles hablan por sí mismos y dicen tanto de las personas… Un fuerte abrazo.
Es cierto. Besos.
La gran importancia de los pequeños detalles. Estoy completamente de acuerdo contigo.
Gracias. Saludos.
Las formas de mala educación son cada vez más comunes. Ahora entras a un negocio y no te saludan ni cuando entras ni cuando te vas. Y da gracias si apenas responden a alguna pregunta específica.
Están por todos lados.
Un abrazo.
Es cierto, pero habrá que enseñarles, ¿no?. Otro abrazo.
Te encargo la tarea. Yo lo intenté y desistí. La gente está cada día más animalizada y por cada resquicio de educación que le das, abren otros tres frentes de ataque. Cada día estoy más convencido (y lo digo en serio, lo he hablado con amigos y con mi pareja, por ejemplo) que lo mejor es irse a una isla desierta; lo que hoy significa no interaccionar con nadie y sólo permanecer rodeado de libros y de material para trabajar nuestro arte: la escritura, la pintura o la música.
Es triste, pero cada día lo hago más y más…
Abrazo.
Bueno, quizás estás ahora un poco deprimido. Un saludo.