Piedras

No me gusta que las piedras tengan «mala prensa». Con las piedras construimos sillares para poder asentar los edificios con seguridad. Sólo hay que mirar las catedrales, los castillos, las casas solariegas, las murallas…, todo aquello que era necesario que perdurara, se hacía sobre piedras.

Por otro lado, las calzadas romanas tenían su firme hecho de piedras. Los mosaicos son obras de arte realizadas con piedrecitas muy pequeñas llamadas «teselas», de diferentes colores, representando escenas que adornaban las casas de los patricios….

Los «cantos rodados» pulidos por la acción del agua, en muchas plazas y calles de nuestros pueblos forman el pavimento con diferentes dibujos, aprovechando su tamaño, sus colores, dándoles una distribución artística y amable….

Los acantilados rocosos, que son auténticas obras de escultura realizada por el mar y el viento y que son capaces de tener formas sugerentes, amenazantes, divertidas….

Estan las piedras pulidas y talladas que se convierten en piedras preciosas y semipreciosas, adornando a las personas que las lucen en sus trajes o en sus adornos personales. ¿Qué sería de la joyería sin las «piedras»?

¿Consideramos el mármol como piedra? Porque muchas esculturas están hechas en este material…y realmente son obras de arte.

Claro que también existe «la piedrecita en el zapato» y esa no es bonita, ni sienta nada bien, simplemente: fastidia. Por eso, cuando surge alguna dificultad o algo molesto en nuestro camino, decimos que tenemos una «piedra en el zapato». Ya ves otra vez la mala prensa para las piedras.